También nos dijeron que los periodistas del Primer Mundo tienen otros estándares de calidad, que ahí no hay tantas presiones de gobernantes y que son incorruptibles, igual que la policía del Primer Mundo (está claro que no es así, basta ver el caso de la Comisaría de Coslada).
La cuestión es que ahora echaron a un vocero policial por avisarle a un periodista del prestigioso diario El Mundo que la justicia estaba tras él. No era por sus profundas investigaciones, sino más bien todo lo contrario: "El periodista habría chantajeado a una fuente, pero según él se limitó a pedirle dinero prestado. En concreto fueron 5.000 euros", según publica el diario Público.
En el caso se investiga la desaparición de 400 kilos de cocaína en el Puerto de Barcelona.
1 comentario:
Je. Lo mejor de todo son esos 400 kilos de merca que desaparecieron del puerto.
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